¿Qué está pasando con la ética en el mundo periodístico? Aquí te contamos sobre la reciente controversia que tiene a todos hablando.
Resulta que en el periodismo hay temas que levantan la voz. Ahora, una comisión especial de ética y deontología ha reaccionado sobre cómo se debe de trabajar en este mundo tan complejo. Todo esto se ha desatado a porque Ignacio Escolar, el del diario digital, se ha quejado de lo que publicó Confidencial Digital y otros que contaban unas acusaciones un poco delicadas.
El origen de este lío viene de unas palabras de un tal Miguel Ángel Rodríguez, que trabaja de cerca con Isabel Díaz Ayuso. Este señor dijo que los de elDiario.es habían ido a molestar a la casa de Ayuso, y varias webs, como Confidencial Digital, hicieron eco de eso. Escolar, claro, no se quedó quieto y presentó su reclamo.
La ética periodística en la mira de todos
La Federación que agrupa a los periodistas de España (FAPE) se metió en el asunto y dice que Confidencial Digital sí que la pifió al no seguir lo que dice su Código de Ética. Ese Código pide que uno como periodista compruebe bien la info, que no cambie documentos ni se salte lo importante, y que no puede ir publicando cosas que sean mentira. Pero bueno, al menos reconocieron que en Confidencial después publicaron una nota diciendo que lo que habían dicho no era cierto, como diciendo "ok, nos equivocamos".
José Apezarena, que trabaja en Confidencial Digital, se defendió diciendo que ellos solo contaron lo que una fuente oficial había soltado. Incluso asegura que incluyeron lo que decía elDiario.es negándolo todo, y que después de un burofax de Escolar, ellos pasaron la rectificación al completo. Él se pregunta que si ahora van a tener que confirmar cada cosa que diga alguien importante para poder publicarlo.
Debatiendo cómo confirmar lo que nos cuentan
Todo esto nos lleva a una pregunta más grande: ¿hasta dónde tienen que llegar los medios para estar seguros de la información que les dan sus fuentes? La gente de la FAPE piensa que uno debe hacer todo lo posible por llegar a la verdad total, más allá de solo ver si la fuente parece de fiar o no.
Parece que Confidencial Digital va a pelearla con la FAPE, no están convencidos con lo que les dijeron y quieren ver si tienen razón. El rollo está en ver cómo pueden hacer su trabajo de informar sin que nadie les ponga trabas.
El asunto sigue en el aire y nos recuerda que hoy, con tanta información pasando, tener la info bien clara y ser éticos es más necesario que nunca. Hay que estar bien despiertos, confiar pero siempre revisar y entender bien el asunto.
La ética, ese tema que no pasa de moda en los medios. Lo que hacen los de la Comisión, esa de quejas y demás, es clave para asegurar que las reglas se sigan y que si algo va mal, se note. La decision que han tomado nos dice que hay que ir más allá de mencionar las fuentes, hay que cavilar bien antes de publicar algo.
Al mismo tiempo, hay que entender que Confidencial Digital tiene todo el derecho de utilizar los recursos a su alcance, porque así funciona la democracia. Hay diferencias de opinión en cuanto a cómo se aplican las reglas de ética y eso es parte de una conversación que no se acaba sobre cómo debe ser el periodismo en estos tiempos.
Que elDiario.es exija corregir el dato y que Confidencial Digital respondiera, muestra cómo este sistema de responsabilidades se tiene que manejar. Es importante que los medios chateen de frente con la gente que los lee y con los colegas, atendiendo las reglas de la ética profesional.
"La verdad os hará libres", una máxima que en el periodismo adquiere una dimensión ética y profesional ineludible. La resolución de la FAPE sobre el caso de Confidencial Digital y elDiario.es nos recuerda que la responsabilidad de los medios va más allá de la reproducción de declaraciones: se extiende a la verificación de los hechos. En una era donde la información circula a la velocidad de un clic, la tentación de sacrificar la profundidad por la inmediatez es grande, pero la integridad del periodismo reside en su compromiso con la verdad. No es suficiente citar la fuente; es imperativo escrutarla. La FAPE, al imponer una "muy cualificada atenuación" de la acusación contra ECD, deja entrever una voluntad de salvaguardar la esencia del periodismo, pero también suscita un debate necesario sobre los límites y desafíos de la profesión en el siglo XXI. ¿Cómo deben los periodistas balancear la rapidez y la rigurosidad? ¿Es posible, en la vorágine de la actualidad, cumplir con ese nuevo requisito de "comprobación" sin paralizar el flujo informativo? Estas preguntas, sin respuestas fáciles, son cruciales para definir el futuro de una prensa libre y, sobre todo, fiable.