La justicia y los principales desafíos del mercado laboral captan la atención
Antonio Sempere, que lidera la Sala de lo Social del Tribunal Supremo, lanzó unas reflexiones interesantes sobre la adaptación legal de las nuevas condiciones laborales. Fue en la XXVI Escuela de Verano del Poder Judicial donde habló claro, diciendo que los cambios no son obstáculos, sino más bien chances de validar los logros de nuestras sociedades.
Parece que empresas como Glovo o Amazon están generando ciertas dudas sobre cómo aplicar los derechos de los trabajadores en estas plataformas tan modernas. Sempere quiere que no perdamos de vista lo importante: un trabajo digno y protección social, incluso en esta nueva ola de modos de trabajar.
Actualizaciones y agilidad en los tribunales que tratan el trabajo
Sin quedarse atrás, Sempere también habla de que hay que hacer más ágiles y eficaces los procesos de la justicia en el sector laboral. El Tribunal Supremo, que tiene más faena que nunca, quiere centrarse en lo realmente importante. Es una forma de aliviar la sobrecarga que tienen y manejar mejor lo que tienen entre manos, algo que a Sempere le parece esencial.
Pero no es sólo trabajar más rápido. También hay que aplicar los criterios más claros, eso sí que está claro, sobre todo cuando toca tratar con el empleo público y el uso inadecido de los contratos temporales. Para Sempere, hay que seguir siempre lo que marca la Constitución y las leyes de la Unión Europea, para hacer frente a cualquier irregularidad.
Lo que piensa el Tribunal Supremo de tratos desiguales y derechos de quien trabaja
Además, el Tribunal Supremo está luchando contra la discriminación, como se ve en cómo abordan temas como el complemento de la pensión por paternidad. Siguiendo la línea de la Unión Europea, quieren que haya igualdad y que se respeten los derechos laborales de todos.
Al final, dice Sempere, lo que cuestionan los riders y otros modelitos de curro más que problemas de leyes son problemas sociales. Se trata de valorar los derechos del trabajador y la protección de la seguridad social. Esto demuestra que hay que entender el curro de otra manera, siguiendo cómo va cambiando la cosa, pero sin olvidarnos de los derechos que hemos conseguido.
Es clave también que uno se tome en serio y compruebe todo esto con fuentes oficiales para entenderlo de verdad.
Pensando en lo que dice esta gente tan importante como Sempere, podemos tener esperanza de que las cosas van a ir a mejor. La idea es que hay que modernizar nuestras instituciones sin olvidar todo aquello en lo que se basa nuestro estado de derecho. Computando lo que se mueve en el mundo del curro, como la movida de las entregas a domicilio, pero sin perder lo que ya hemos conseguido.
Pensar en cómo se puede seguir mejorando el sistema judicial también es importante para generar más confianza entre nosotros y defender bien nuestros derechos.
Y ya para acabar, te lanzo una pregunta: ¿Qué más podríamos hacer para que los derechos de los trabajadores sigan firmes y fuertes mientras el mundo laboral no para de cambiar? A ver qué piensas tú.
"El futuro tiene muchos nombres. Para los débiles es lo inalcanzable. Para los temerosos, lo desconocido. Para los valientes es la oportunidad." Esta reflexión de Víctor Hugo toca la esencia de lo que Antonio Sempere expone en su visión sobre el panorama laboral emergente en España. Los trabajos vinculados a la gig economy, como los de Glovo o Amazon, no son un obstáculo intransitable, sino una oportunidad para reafirmar los logros sociales alcanzados y adaptarlos a la nueva realidad.
Sempere nos recuerda que el contrato de trabajo y la Seguridad Social son pilares fundamentales de nuestro estado social, y que frente a los desafíos que presentan los nuevos modelos de empleo, la respuesta no debe ser la resistencia, sino la eficiencia y la adaptación normativa en concordancia con los principios de igualdad, mérito y capacidad.
Es imperativo que los juzgados de lo social estén armados con criterios claros y recursos suficientes para manejar la avalancha de casos que se les presenta. La sobrecarga que enfrenta el Tribunal Supremo es un reflejo de una sociedad en transformación, una que requiere de una justicia ágil y preparada para interpretar las normas en el marco de la Constitución y el Derecho comunitario.
En el caso de los 'riders' y otros trabajos emergentes, Sempere hace hincapié en que el verdadero desafío radica en cómo la sociedad valora los derechos laborales y la seguridad social. El reto es social y está en nuestras manos transformarlo en una oportunidad para fortalecer el estado social y no debilitarlo. Es aquí donde la valentía de la que hablaba Víctor Hugo debe brillar, al tomar las riendas de esta nueva realidad y moldearla en beneficio de todos.