La situación de Youssef El Mahmoudi, un activista saharaui que ha estado recientemente en el centro de atenciones debido a problemas con su estancia en el aeropuerto de Bilbao, ha levantado más de una ceja y generado debates sobre cómo se manejan tales circunstancias. Mientras algunos luchan por su causa desde su trinchera humanitaria, otros parecen ponerse la corbata de la burocracia para responder.
La ministra de Juventud e Infancia, Sira Rego, no ha pasado por alto la historia de El Mahmoudi, que tiene un fondo de persecución relacionado con su aporte estudiantil. Ha hecho una llamada bastante significativa sobre permitir su entrada a España no de forma definitiva sino provisional, porque hay veces que hay que mirar más allá de los papeles y los procesos.
Pidiendo la entrada por una buena razón
La ministra ha estado firme al pedir al Ministerio del Interior que piensen un poco en El Mahmoudi y actúen rápido. Esta historia hasta se ha compartido en redes sociales, y no solo muestra que a la ministra le importa de verdad, sino que nos hace pensar si estamos haciendo lo suficiente por gente como él.
Lo complicado de volver a Marruecos
Para El Mahmoudi irse de vuelta a Marruecos no ha sido pan comido. Desde pilotos que han dicho que no a su vuelo hasta él, mismo sintiéndose tan acorralado que se puso en huelga de hambre, la cosa se ve difícil. Los jueces tampoco han ayudado mucho, manteniendo su decisión de no dejarlo quedarse en España. Este lío muestra que a veces las leyes de un país y lo que es justo para todos los seres humanos no encajan bien.
Nos encontramos frente a un ejemplo de esos problemas gordos con los que hay que lidiar hoy en día: qué hacer con los que luchan por causas importantes pero que se encuentran atrapados entre políticas migratorias y principios de humanidad. Ojalá que los que pueden tomar decisiones piensen en la persona y no solo en la ley. En estos tiempos de tantos debates, es vital que sigamos hablando de estas cosas y buscando cómo hacer lo correcto sin perjudicar a otros.
¿Tú qué piensas de todo esto con Youssef El Mahmoudi? ¿Cómo crees que deberían hacerse las cosas para que se respeten las leyes pero también se mire por la gente?
"La indiferencia y la negligencia a menudo hacen mucho más daño que la aversión abierta", una reflexión de J.K. Rowling que bien podría aplicarse al caso de Youssef El Mahmoudi. La solicitud de la ministra Sira Rego al Ministerio del Interior es un claro llamado a la humanidad y al deber de protección que un Estado debe ofrecer a quienes buscan refugio lejos de la persecución. La negativa del piloto de llevar a El Mahmoudi a Marruecos no hace más que subrayar la complejidad de la situación y la necesidad de una respuesta que no solo sea legal, sino profundamente humana. No podemos cerrar los ojos ante quienes, como Youssef, enfrentan peligros reales por ejercer su libertad de expresión y activismo. España, como país que se precia de respetar los derechos humanos, debe actuar de acuerdo con esos principios y no permitir que se repitan historias como la de Husein Amadour. La protección internacional no es un favor, sino un compromiso con la vida y la integridad de las personas.