Alguna vez te has preguntado por qué Goku nunca revivió a su abuelo Son Gohan con las Bolas de Dragón? Si eres un aficionado de Dragon Ball, sabrás que estas esferas mágicas cumplen deseos, criterio que incluye devolver la vida. A pesar de ello, Goku nunca optó por revivir a su abuelo Son Gohan, quien tuvo un papel central en su desarrollo.
Las Bolas de Dragón son legendarias por su capacidad de hacer realidad casi cualquier sueño. Pero entonces, ¿por qué Goku, quien tanto quería a su abuelo, no se benefició de esta posibilidad para tenerlo de vuelta? A primera vista, uno podría pensar que había ignorado una opción galante. Si pudo traer de nuevo a la vida a Bora, un guerrero noble, ¿por qué se contuvo con su propio pariente?
Restricciones de las Bolas de Dragón
Se sabe que las Bolas de Dragón vienen con ciertas reglas, como la verdad sobre la posibilidad de renacer una única vez y que no se puede resucitar a aquellos que murieron de causas naturales. El fallecimiento de Son Gohan, sin embargo, fue accidental, por obra de un Goku que, inconsciente y transformado en Ozaru, lo aplastó. Aparte de esto, hay otra regla importante: debe transcurrir menos de un año desde la muerte para que la resurrección sea viable.
El tiempo pasó y la viabilidad de devolver a Son Gohan a la vida se disipó. Pero incluso si se considerara alguna excepción, algo más pudo haber estado en juego.
Otros conjuntos de Bolas de Dragón
Dragon Ball eventualmente volvió a colocar sobre el tablero sesudos conjuntos de Bolas de Dragón, como las dúctiles Super Bolas de Dragón. Sin embargo, podría ser que Son Gohan, en su sabiduría y durante la Saga de Red Ribbon, simplemente prefirió la paz del más allá. Goku, al respetar el sentir de su abuelo, se inclinaría por honrar esa elección en vez de perseguir la súbita resurrección.
Este relato demuestra que, aunque las encarnaciones del anime suelen estar cerradas a decisiones más mundanas, Dragon Ball nos confronta con múltiples mensajes morales. Respetar la muerte y la continuidad tras ella se vuelve tan importante como la vida misma. Profundizar en los capítulos nos regala un mirar más atento sobre la ética de los actores y el marco en que se desempeñan.
Reflejos de un Valor
La saga nos deja con la metáfora de la permanencia y la memoria, en donde Goku, en homenaje a su abuelo, nombra a su hijo Son Gohan. A través de sus aventuras y escollos, Goku realza deberes morales y enseñanzas.
Goku demuestra sensibilidad y consideración hacia la elección de su pariente en la eternidad, mostrándonos que, aún en series del imaginario colectivo como Dragon Ball, preservar los deseos de los que se han ido puede ser el conmovedor tributo hacia su libertad de elección. Esto teje un paralelo dueño de ecos reales sobre el honor y la trascendencia más allá del telón corpóreo.
¿Qué te parece la decisión de Goku de dejar en paz a su abuelo Son Gohan? ¿Crees que tomó el camino correcto? La serie nos deja con esa pregunta, y, tal vez, la respuesta está en nuestros propios valores.
"La muerte es ese viaje al desconocido país del cual ningún viajero ha regresado", escribió William Shakespeare, y tal vez esa sea la razón por la cual ciertos personajes de ficción, como el abuelo Son Gohan de "Dragon Ball", encuentran en la muerte un destino más apetecible que la vida misma. En una saga donde la muerte puede ser tan efímera como un parpadeo, la decisión de Goku de no resucitar a su abuelo no solo respeta las normas establecidas por el universo en el que habita, sino que también revela un respeto profundo por la voluntad y la felicidad de aquellos que ya no están. Son Gohan, quien encontró dicha y compañía en el más allá, nos recuerda que a veces, el amor por nuestros seres queridos también implica dejarlos ir. Y es que, en definitiva, la muerte puede ser una nueva aventura para el alma, una aventura que, tal vez, algunos deseen explorar sin retorno.