El destino de la coparticipación a Caba está en juego: ¿Cumplirá el Gobierno tras la polémica reclamación de Macri?

La polémica por la coparticipación de CABA se aclara un poco más al conocer el posicionamiento del Gobierno frente al dictamen de la Corte Suprema. Pero, ¿esto qué alteraciones traerá en el panorama de la política argentina?

El Gobierno de Argentina dejó saber que tiene planeado respetar lo que la Corte Suprema dictaminó sobre cómo se deben repartir los ingresos entre la nación y la Ciudad de Buenos Aires. Manuel Adorni, que habla por el presidente, dijo que sí se van a alinear con lo que la Corte dijo, pero todavía no nos dicen cuándo van a empezar a hacerlo.

En una conferencia de prensa que hubo, Adorni habló de que el Ejecutivo tiene mucho respeto por lo que la justicia decide y que por eso están hablando con la gente de la Ciudad para solucionar esto. Esta forma de actuar es parecida a lo que el expresidente Mauricio Macri había pedido, porque él también quiere que la Ciudad reciba más plata, que pase del 1,4% al 2,95% que antes se daba.

¿Qué cambios vienen con seguir lo que dijo la Corte?

Si el Gobierno sigue adelante con esto, la Ciudad de Buenos Aires va a ganar más dinero, pero también podría significar menos peleas políticas. O sea, que tomar este camino podría verse como una onda de paz hacia el partido PRO, que es el de Macri, y que ellos también estaban pidiendo lo mismo.

Adorni comentó que ya hubo reuniones entre Jorge Macri, que lidera Buenos Aires, y Luis Caputo del Ministerio de Economía, entonces parece que hay buena onda para llegar a un acuerdo. El vocero recalca mucho eso de hacer caso a lo que decide la justicia.

Se viene más cooperación en la política?

La gente se pregunta si el lío que hay dentro del PRO, sobre todo con Patricia Bullrich que trabaja en seguridad, va a hacer más difícil que trabajen juntos en el Congreso. Pero Adorni dice que no se meten en los rollos de otros y que no va a afectar las veces que tengan que llegar a acuerdos.

El Gobierno parece que sí quiere hacer las cosas bien, siguiendo lo que dicen los jueces y hablando con todos los que hacen política, sea del partido que sea. Pero para saber bien qué está pasando, mejor que cada uno lea y se informe por su cuenta.

El hecho de que el Gobierno siga lo que la Corte dice muestra que respeta las reglas del juego democrático y esto es clave para cualquier país que se diga democrático. También, se ve como que quieren llevar la fiesta en paz con todos los que gobiernan en el país, aunque en algunas cosas no piensen igual.

Como gente del país, tenemos que estar pendientes de cómo se manejan estos líos entre políticos y valorar mucho eso de que se cumpla la ley, porque eso hace más fuertes a nuestras instituciones y da más confianza en cómo funciona la democracia por acá.

Me gustaría saber qué piensan ustedes: ¿Creen que hacer caso a lo que dice la justicia va a hacer que haya más buena onda para trabajar juntos en el gobierno y entre los partidos?

"La justicia no es otra cosa que la conveniencia del más fuerte", esta cita de Platón puede resonar en los oídos de muchos en estos tiempos de disputas políticas y judiciales en Argentina. El anuncio del Gobierno de cumplir con el fallo de la Corte Suprema de Justicia sobre la coparticipación a la Ciudad de Buenos Aires, es un claro ejemplo de cómo la justicia puede ser percibida como una herramienta en manos de los poderosos. La decisión de acatar la sentencia no solo es un acto de reconocimiento a la autoridad judicial, sino también un movimiento estratégico para aplacar las tensiones con el PRO, un rival político pero a la vez necesario aliado en el Congreso. La política, en su juego de ajedrez constante, nos deja ver que aún en medio de las disputas más encarnizadas, se puede encontrar un punto de encuentro cuando la conveniencia lo dicta. La pregunta que queda en el aire es si este cumplimiento será un verdadero acto de justicia o simplemente un gesto de conveniencia política. La línea entre ambas a menudo es tan delgada que se vuelve difusa, y es ahí donde la ciudadanía debe mantenerse vigilante y crítica.

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